#ZNLibros – Especial Primera aparición, de David Galán Galindo

RESEÑA DE PRIMERA APARICIÓN

Edición nacional/ España: Alianza Editorial.
Autor: David Galán Galindo.
Páginas: 400.
Precio: 18,95 €.
Formato: Rústica.

El Kevin Smith español, así llamamos cariñosamente a David Galán Galindo en la sección de cine de Zona Negativa. David es un artista polifacético cuya verborrea e ingenio le ha permitido ser guionista de cómics, autor de novelas o director de cine. Casi nada lo del ojo. Indudablemente, la carrera de David Galán Galindo está marcada por Orígenes secretos, una novela que se hizo mayor hasta convertirse en la primera entrega de una saga y un libro que resultó tan interesante como para tener una adaptación audiovisual de primer nivel. Javier Rey, Veronica Echegui, Brays Efe, Antonio Resines, Ernesto Alterio, Carlos Areces, Leonardo Sbaraglia o Álex García formaron un auténtico all-star castizo, un reparto de campanillas a las órdenes de un cineasta novel hambriento de nuevas emociones. La película, una de las pocas producciones españolas que se han atrevido a formar parte del trillado género superheroico, fue un notable éxito en Netflix y acumuló tres nominaciones en los Premios Goya de 2020.

Con semejante carta de presentación, todo hacía pensar que el camino de Galán estaría sembrado por una ingente cantidad de rosas. Sin embargo, el destino de este polifacético escritor nacido en Ávila se ha caracterizado por tener no pocos obstáculos. Mientras David esperaba recibir luz verde para la segunda parte de Orígenes secretos, dio el salto a la comedia con Matusalen, cinta protagonizada por Julián López en la que dio rienda suelta a otra de sus grandes pasiones: el hip-hop. Si gustáis, podéis disfrutar de su visionado en Amazon Prime Video.

Pasó el tiempo y David Galán Galindo comprobó que no siempre los sueños se hacen realidad. La posibilidad de que Orígenes secretos tuviera una secuela cinematográfica se fue desvaneciendo y el antiguo guionista de Sé lo que hicisteis… decidió tomar cartas en el asunto. Lejos de abandonar la franquicia y a sus personajes, se remangó para hacer lo que mejor sabe: escribir. Primera aparición es la continuación lógica de Orígenes secretos. Como toda buena segunda parte que se precie, la novela publicada por Alianza en abril de este mismo año es más grande, más espectacular y con una carga de profundidad en sus personajes mucho mayor. Algo que no es de extrañar si tenemos en cuenta la evolución de David como escritor, así como la expansión de la propia mitología de la serie.

En Primera aparición volvemos a contar con el trío protagonista formado por David Valentín, Jorge Elías y Patricia Aleta. Mientras ahondamos en el pasado de los personajes para que su background sea mayor, un nuevo caso centrará la atención de todo el mundo. Pese a que Novaro fuese liquidado al final del título original, alguien parece estar tomando el testigo del ilustre villano. Los orígenes secretos dejan su espacio a las primeras apariciones por lo que los amantes a los cómics de superhéroes se darán un buen festín gracias a los continuos homenajes que David Galán Galíndo inserta en las páginas de Primera aparición. El fanservice marca de la casa Galindo está presente en todo momento con menciones, consecutivas, a productos de la cultura popular. Juego de tronos, Bola de dragón, El señor de los anillos… cualquier licencia que os podáis imaginar tiene su lugar en Primera aparición.

Si en su día leísteis Orígenes secretos y os gustó, os aseguramos que Primera aparición os va a encantar. El universo creado por David Galán Galindo ofrece un pase VIP para todo friki que se precie. Perdonándole que todavía no haya hecho mención a Zona Negativa en las citadas novelas, David ha conseguido llevar a cabo una continuación en la que vemos aflorar secretos que cargan de potencia dramática a la trama. La aparición del misterioso personaje conocido como Sayón así como el asentamiento del nuevo y carismático villano, César Surco (AKA “El Llorica”) duplican el peligro para un Vértice con cierta atracción por el lado oscuro.

Madrid sigue siendo el escenario ideal para este universo. DGG se recrea en la descripción de cada emplazamiendo regalándonos auténticas postales. El único límite es nuestra imaginación. Liberados de las cadenas que suponen los copyrights, tanto la novela de Orígenes secretos como Primera aparición son lecturas infinitamente superiores a cualquier versión que pudiéramos tener en pantalla grande. Como poco, Vértice y compañía se encuentran en el ecuador de su viaje. No sabemos cuál será la próxima parada del Galán Galindo Express, pero en Zona Negativa estamos deseando saborear el rico manjar que, a buen seguro, sabrá elaborar este amante del noveno arte.

ENTREVISTA A DAVID GALÁN GALINDO

ZONA NEGATIVA (ZN): Televisión, cine, teatro, cómics, novelas… ¿Hay algo que le quede por hacer a David Galán Galindo?

DAVID GALÁN GALINDO (DGG): Bueno, Sergio, antes de nada, muchas gracias por esta entrevista. Estoy encantado de hablar con vosotros. ¿Qué me queda por hacer? Pues yo creo que primero hay que concentrarse en hacer bien lo que ya estoy haciendo. Creo que me quedan muchas cosas por contar en todos esos medios. Me gusta todo lo que sea contar historias. Entonces, pues me encantaría probar también, a veces, yo que sé, la ficción sonora por ejemplo. Tengo varios colegas, Juanjo Ramírez o Bartual, que hacen cosas ahí bastante chulas. Así que por probar, también me gustaría. En realidad, a mí lo que más me gustaría del mundo es sacar más cómics. La cabra tira al monte y a mí lo que me fliparía es tener muchas más oportunidades para sacar tebeos.

ZN: En la introducción de Primera Aparición explicas cómo surge esta segunda entrega. Dices “por intentar ser justo con el público, he estado a punto de ser injusto con mis personajes.” Si te hubieran ofrecido llevar a cabo una segunda película, ¿este libro nunca hubiese visto la luz?

DGG: Pues, si te soy sincero ese era el plan original porque yo sé que escribir el libro me lleva mucho más tiempo y es mucho más curro. Yo sabía que si me ponía a hacer la película, el libro no me iba a apetecer. Aunque yo lo que quería era contar esta historia y me daba la sensación de que iba a convertir el libro en merchandising. Eso era algo que no quería bajo ningún concepto. Obviamente, no puedes meter en una película lo que se mete en un libro, ni puedes profundizar tanto. Incluso Jorge Elias lo dice en la película, que los libros siempre son mejores. La novela de Primera aparición es, no el doble, sino cuatro veces mejor de lo que sería la película de Primera aparición. Y aún así, ojalá se haga, ¿sabes? porque me encantaría. Pero es cierto que yo, como soy autor de las dos cosas, lo consenso sin ningún tipo de pudor.

Pero sí que pensé eso. Sobre todo, porque tenía modelos como por ejemplo este de Mario Puzo, que él hizo la novela de El padrino y luego El padrino 2 y El padrino 3 los hizo directamente en película. Entonces, bueno, me parecía un referente. Si este señor, que es mucho más listo que yo, ha hecho eso, me parecía un buen referente. Pero sí que es cierto que creo que tiene que haber tenido un músculo más rápido y haberme puesto con la novela antes incluso, porque me parece que es importante que estos personajes sigan vivos.

ZN: Orígenes Secretos fue todo un éxito en Netflix y estuvo nominada a tres Premios Goya. ¿Cómo te sienta que, por el momento, no haya tenido continuidad en formato audiovisual? ¿Pensaste que sería más sencillo?

DGG: Sí, es curioso. Es una cosa que, en general, en el mundo del cine me ha pasado. Cuando fui a levantar la segunda película, incluso cuando no era Orígenes Secretos, yo pensé «bueno, después de la primera película, ya cuando entre a ese despacho llego con un escalón más» y me doy cuenta de que no es así. Es como en un videojuego en el que cuando te matan, vas otra vez al principio de la fase. Como que no hubieras obtenido esos galones. Tú tienes que empezar desde el principio. Y es verdad que para mí fue sorprendente, porque yo sí que pensé, «bueno, pues joder, vengo ya con una movida que me va a dar cierto respaldo», pero lo cierto es que no te lo da. Sobre todo con este tipo de películas que yo hago, porque son producciones que ellos no quieren hacer.

Nadie quería hacer una película de superhéroes, les tuve que engañar, y nadie quería hacer una película de rap y lo mismo. Todo el rato hago Caballos de Troya, de «no la queréis, pero la vais a ver». Te hablo de la gente del dinero, la gente que paga la peli. ¿Cómo me sienta? A ver, tengo claro que hay un montón de razones para que yo quiera contar esta película, aparte de porque es mi historia y son mis personajes. Yo quiero que España tenga su propia mitología, que tenga sus superhéroes. Creo que nos tenemos que quitar un montón de complejos y lo hago en todos los ámbitos. Cuando me pongo a hacer Pro, es una versión del Capitán América a la española. Todo el rato, como autor, me pongo aquella mochila a la espalda, súper complicada, porque soy así de gilipollas, de decir «voy a intentar demostrar que esto se puede hacer». Sé que eso solo me importa a mí. Ese tipo de, entre comillas, responsabilidad que yo me impongo, a nadie le importa. Y a ellos, pues bueno, que no tengamos esa clase de historias en España, les da igual.

A la hora de Netflix dar luz verde a este proyecto o no, pues una cosa que tienen clara es que ellos se segmentan por públicos, digamos. Y el público al que llega Orígenes Secretos es un público que ya tiene una suscripción a Netflix porque se han suscrito para ver Stranger Things, para ver las pelis de superhéroes que tienen, para ver Musculman, que aprovecho para decir que estoy enganchadísimo a esa mierda. Ya están dentro. Entonces dicen «si ya han pagado la entrada, ¿para qué les voy a dar más?».

Ellos quieren dirigirse a públicos que no tienen. Y de pronto pues dicen, «vamos a hacer películas para chicas de 15 años». O vamos a hacer películas o series para dirigirme a este público de tal estatus social o gente que no tienen. Y yo hago cosas que, ya digo, ellos tienen ya todoterrenos. Ellos ya tienen ahí Cobra Kai, cuya audiencia es la misma que ve Orígenes Secretos, ¿no? Y ya están dentro. Es un poco como los bancos que no le regalan la vajilla ni la televisión de 60 pulgadas al tío que lleva 40 años con dinero en su banco. Lo que quieren es nuevos clientes. A este tío que lleva 40 años con nosotros, ni agua. Pero si me traes tu nómina, te regalo una tele. Y entonces, pues bueno, claro, pues a mí me da rabia, lo reconozco, pero es como funciona su negocio.

ZN: Yo creo que para la próxima novela, David, tienes que llamar, al villano, Algoritmo.

DGG: Algoritmo, sí, sí (risas). Totalmente. Si sale la película de Sargento Resines, el malo al final es una IA y Hay un poco de esto, de cómo nos quieren controlar. Hay una cosa ahí curiosa. Porque sí, desde luego es luchar contra los molinos de viento.

ZN: Tampoco es morder la mano que te ha de comer, pero, en el caso de Netflix, hay unos cuantos productos de primer nivel que no han tenido continuidad y los decieron cancelar. Se me vienen a la cabeza cosas muy potentes, desde Mindhunter hasta Cristal Oscuro.

DGG: Es curiosísimo. En nuestra cabeza pensamos todo el rato en el número de visualizaciones. Tenemos esa cosa analógica de pensar «pues si esto lo ha visto un montón de gente ¿cómo no van a querer renovarlo?» y cuando no lo renuevan es porque, pensamos, no lo ha visto tanta gente. No os equivoquéis, puede ser que alguna vez se acierte pero no tiene nada que ver. De hecho, con Orígenes Secreto, yo lo comprobé porque cuando vi que no se activaba la peli, dije «bueno pues aunque hayamos sido número uno y top seis mundial, será que no nos ha visto tanta gente». Y de pronto cuando ocurren las huelgas de actores y guionistas en Estados Unidos, los sindicatos logran que las plataformas den datos reales. Entre enero y junio del 2023, solo son seis meses, Orígenes Secretos estaba en el top 25 de habla hispana y dos millones de horas de visionado. Es decir, la hostia, más teniendo en cuenta que estamos hablando tres años después del estreno.

Entonces, ¿qué coño pasa? Lo que ocurre es esto, que no les importa que lo vea mucha gente. Es lo que tú dices, Sergio, pero ¿cómo puede ser que esta serie, que la ve todo Dios, la cancelen? Y es porque realmente ellos se fijan en otras cosas. A mí en su día me hablaron de una cosa llamada la tasa conversacional o el índice conversacional que es cuánta conversación genera una serie. Si está en la calle, porque si está en la calle, en redes sociales eso puede hacer que haya nuevos suscriptores. Si la ve un montón de gente pero no hablan de ella, nadie se va a suscribir. Ya son cosas que a nosotros se nos escapan. El algoritmo no es ver las views, el algoritmo es mucho más complicado y más cabrón (risas).

ZN: Cuando entrevistamos a autores de cómics solemos preguntarles por sus referentes. Más allá de los tebeos, ¿qué novelas, piensas, han podido servirte de inspiración antes de abordar Orígenes secretos?

DGG: Pues a ver, antes de Orígenes Secretos, claramente, El Nombre de la Rosa, aunque los ambientes y todo lo demás sean distintos y no haya manera de ver las similitudes. Además de El Nombre de la Rosa, El Club Dumas, que me parece un auténtico novelón. Yo pondría estas dos… En su día leí bastante novela negra más moderna, como para… «bueno, ya que voy a intentar convertir mi historia de superhéroes en esto, voy a ver qué traje de cordero tengo que ponerle». Pero, en realidad, ya digo, estos serían mis dos pilares. Bueno y el modelo realmente gordo, gordo, ya sabes tú que era Seven. Pero como me preguntas específicamente por novelas, te digo estas dos o El silencio de los corderos, que sí que es una novela.

ZN: Es más que obvio que sientes devoción por el noveno arte. Has hecho tus pinitos en el mundo del cómic. Sin ir más lejos, el año pasado publicaste Pro con Panini. ¿Nunca contemplaste que Orígenes Secretos tuviera su propia expansión en viñetas?

DGG: Pues mira, yo tengo un problema y es que soy Santa Clara Bendita, entonces muchas cosas que me tendría que callar, no me las callo. Cuento mis miserias sin problema. Yo te puedo decir que, como sabes, en la película de Orígenes Secretos hubo algunos cambios respecto a la novela. Entonces, yo dije «mira, pues, la continuación de la novela es esta que voy a sacar con Alianza y la continuación de la película pues la puedo sacar en formato cómic». Son dos productos más que no se pegan en absoluto. Y hubo un proyecto, junto a un dibujante de cómics que es la hostia, como es Zayas. Pues él y yo hicimos un proyecto y lo movimos por editoriales y no lo quisieron.

ZN: Curioso.

DGG: Es que, mira, ya me pasó… Cuando yo hacía la promo de Orígenes Secretos, yo decía todo el rato «es más fácil hacer una película de superhéroes que sacar un cómic en España». Y era como «qué cosas, qué chorradas dices, es una reducción al absurdo». Pero para mí no era una reducción al absurdo, era narrar mi vida. Yo es que eso lo he vivido en mis carnes. Con Manuel, con Manuel M. Vidal de mi vida, que en paz descanse, dibujante de Pro, él y yo tuvimos proyectos para sacar cómics en España. Me he movido por todos los salones y me han dicho que no de todas maneras y colores. Ni siquiera con una IP tan potente como Orígenes Secretos quiseron hacerlo. Creo que lo que quieren ellos es que aparezcas con el cómic dibujado, con el trabajo hecho, y les diga «oye, ¿me publicas esto?». Yo creo que con cierto nivel como el que tiene Zayas, o que el tengo yo, no puede ser así.

ZN: Vamos a hablar un poco, si te parece, del proceso creativo. Como en Orígenes Secretos, Primera Aparición cuenta con un chorreo constante de referencias a todo tipo de obras de la cultura popular. A ti que te gusta el rap, David, ¿hasta qué punto todos estos guiños los tienes pensados o te van saliendo sobre la marcha?

DGG: Totalmente sobre la marcha. Yo, en realidad, juego a un juego de rol de ir según voy avanzando, ver qué referencias se me ocurren. Intento ser bastante fiel también a un rollo de, «si yo no lo sé, no lo sabe Jorge Elías». Puede haber alguna cosa que digo, «joder, no me acuerdo de este dato en concreto y Jorge Elías es más listo que yo». A lo mejor tengo que mirar en qué año fue lo del Spider-Móvil, vale. Sí que yo a lo mejor fallaba y él no falla, pero aunque lo conozco e intento ser muy, muy, muy fiel a eso y, de hecho, pues por eso hay un montón de campo que no conoce, porque yo mismo no estoy metido ahí. Sí que hay algunas veces que me lo salto. Por ejemplo, con Patri que ella, a lo mejor, está más puesta en manga que yo, y si va a hablar de esto, se va a poner un delantal de un manga, pero sí sé que existen mangas de cocina específicos… Entonces veo los mejores mangas de cocina y puede que consulte a un colega «oye, ¿de estos cuál?». Así que sí que hay algo más que no es tan mío, pero, si no, intento ser bastante estricto con eso y que me vaya saliendo. Además es que es súper divertido jugar a ese juego. Yo me lo tomo como un juego de rol y empiezo a decir auténticas paridas maravillosas.

ZN: Toda buena secuela tiene que ser más grande y mejor. Primera aparición cuenta con más páginas y mayor profundización en los protagonistas. Al no ser tu primera incursión, ¿te resultó más fácil su escritura o el hecho de tener un listón razonable alto provocó que te autoexigieras más?

DGG: Pues, a ver, he de decir que me considero mucho mejor escritor ahora. Y, de hecho, por ejemplo, leo Astro Bus, que es el relato que se incluyó en la edición de Alianza, y me veo a mí mismo. Digo, «esto es lo que escribo yo». Pero leo Orígenes Secretos y sí pienso, «joder, cómo se nota que lo escribí hace diez años». Me parece que está… Bueno, pues es que era mi ópera prima, era mi primer libro, era mi primerito día. Y, en ese sentido, en realidad tenía muchas ganas de volver a meterme en este universo para decir, «joder, con todas las habilidades que tengo ahora, voy a volver a coger a estos personajes y voy a tratarlos mejor».

Incluso hay una cosa que cuento que hice… no sé cómo decirlo. No quiero decir de escritor vago, pero, por ejemplo, en la primera novela yo a Jorge Elías le quité a su madre porque no me venía bien. No quería un personaje más. Yo necesitaba que él estuviera solo con el padre por esto, por esto y por esto. Ni siquiera me di cuenta de lo que estaba haciendo, no pensé en las repercusiones de cómo eso había afectado al personaje ni demás. He conocido gente que perdió a su madre siendo niño y me he dicho «tengo que ser mucho más justo con estos personajes y tengo que ver cómo les ha afectado su propia historia y conocerla un poco». Me he dado bastantes gustos de esos en Primera aparición. Además, gozándome que no fuera una película y decir, «bueno, esto es inadaptable pero me da igual. El lector necesita saber esto». No pensando tanto en cómo lo haríamos en una película. Creo que es una novela mucho más novela, en ese sentido.

ZN: En Primera Aparición se menciona no pocas veces La historia interminable de Michael Ende. En esta segunda novela se aprecia, en el personaje de David, cierta atracción por el lado oscuro. ¿En tu cabeza existe ese paralelismo entre Vertice y Bastian?

DGG: Totalmente. De hecho, en mi cabeza, hay un montón de capítulos que se llaman igual. Solo que alguna cosa está como cambiada. Por ejemplo, en vez de Fantasía en Peligro es Madrid en Peligro. Ese tipo de cambios tampoco… no hay que estrujarse mucho la cabeza. Y sí que empezó porque me gustó muchísimo la cita con la que empiezó el libro. Y entonces, a raíz de ahí, dije, «pues va a ser uno de los de las capas, uno de los paralelismos con La historia interminable, con El libro de la historia interminable, además». Es el tema que justo hablamos antes, que lo verbalizan en el libro, no está en la película y es la tipa de cosa que cuando te acercas al libro dices, «joder, si esto es importantísimo. Si lo que más mola de La historia interminable es cuando empiezas a sufrir por Bastian, cuando tiene esa degradación» y me parecía muy interesante hacer ese homenaje. Sobre todo porque el que no ha leído La historia interminable, pues le da igual, pero el que lo ha leído dice, joder, aquí hay un esqueleto primigenio que puedo vislumbrar, ahí debajo.

ZN: Continúas con tu particular homenaje a las editoriales españolas. En esta ocasión, Iñigo Astiberri o Ececé se unen a las ya clásicas Patricia Aleta o Norma Celimendiz, por citar algunas. Además, mencionas al podcast Sala de Peligro, en el cual eres colaborador. Teniendo en cuenta que en toda investigación que se precie, David Valentín y Jorge Elías tienen que tirar de hemeroteca para atrapar al villano. ¿Para cuándo una aparición de Zona Negativa en esta serie?

DGG: Pues mira, tendría todo el sentido del mundo porque yo he estado en el universo Zona Negativa desde el principio, o sea, que no te extrañe. Con Raúl López yo escribía también en Spiderman Universe, la primera que él tuvo. De hecho, estoy seguro de que Jorge Elías, como es un trasunto mío, en su día escribió algún artículo para Zona Negativa. Aún no ha salido, pero vamos, puede salir perfectamente. Jorge Elias tiene un usuario en Zona Negativa sin lugar a dudas.

ZN: Sí, sí. Yo le veo buscando en La Pirámide, ahí con el ordenador.

DGG: Hombre, sí, sí. El ordenador este bestial y el cabrón buceando en Zona Negativa. Para esto, míralo en el móvil. No, no, no. Esto va más rápido (risas).

ZN: En Primera Aparición tenemos un nuevo villano, César Surco (El Llorica). ¿En qué personajes te inspiraste para su creación?

DGG: A ver, lo primero de todo en el Joker. Solo que, claro, no quería que fuera ese nivel de locura, de la nada. Es una cosa curiosa porque siempre estamos empeñados en que los orígenes de los villanos, que de ahí hay que sacar oro. Y del Joker, es cierto, nunca nos ha hecho falta. Llegas, el mal por el mal, y ya está. Pero yo eso no podía cogerlo porque una de las cosas básicas que tiene la saga de Vértice, para mí es esforzarme mucho en que sea realista. ¿Cómo narices puede acabar este tío con un Batmóvil? ¿Cómo puede acabar con esto? Como psicológicamente… ¿qué puede llevar a un tío a ponerse un… no voy a decir un disfraz porque no es un disfraz, pero es un traje característico, ponerse un nombre de supervillano y hacer cosas de villano? Y entonces sí que me he esforzado mucho en gastar páginas y páginas en que el lector se lo crea, que diga vale, entiendo el viaje que ha hecho este tío. Ya te digo, sobre todo, tiene algo de Kingpin, tiene mucho del Joker… De hecho el origen secreto de estas cosas suelen ser chorradas como pianos. El origen secreto de El Llorica es que me gusta que fonéticamente suena muy parecido al Joker.

ZN: Cierto, no me había fijado.

DGG: Esa estupidez es el germen del que, de pronto, ya te vas a dormir y al día siguiente me pongo a investigar. Descubres que la risa y el lloro, básicamente, se hace en la misma parte del cerebro que, por eso, muchas veces, cuando alguien está riéndose tu cerebro tarda unos segundos en decodificar si está riéndose o llorando. Me parecía también pues toda una iconografía bastante guay para un villano. De hecho, en Astro Bus ya se le menciona y lo hice solo por eso.

Es que El Llorica suena muy bien y luego es como, vale, a ver qué narices hace el tío este. Ha sido muy divertido, la verdad. Sobre todo pensar cómo puedes leer algo así de comiquero, porque, claro, en mi resolución de la ecuación siempre intento que acabe siendo cómic, cómic. No una película de Nolan, cómic. Porque una película de Nolan sería, vale, este señor no se pone ningún nombre estúpido, no se disfraza de ninguna manera, pero es muy malo. No tío. Yo quiero que acabe con un traje y que acabe con un nombre de villano. Entonces, ¿cómo hacer que empiecen a caer las piezas para que eso te lo comas? Para mí es difícil, pero es súper gustoso. Cuando creo que lo he conseguido, digo, vale es esto. Hay una escena, creo que no es spoiler, en la que dice «si él es un héroe, yo seré el villano»… dije «esto es». Así que muy contento con El Llorica, la verdad.

ZN: Y si, finalmente, esta novela fuese adaptada en formato audiovisual. ¿Quién te gustaría que interpretase a los nuevos fichajes: César, Lucia e Iñigo? Porque, a este último, John Candy no va a poder ser…

DGG: No va a poder ser. A ver, César Surco me gustaría que fuera Mario Casas porque es un tío que tiene un compromiso con los personajes de la hostia. El tío creo es prácticamente un actor del método y tiene un compromiso que yo creo que le vendría muy bien al personaje. Además, es un tío que te puedes creer que le dé de hostias a Javier Rey. Es muy importante que te creas que este tío, simplemente, va al gimnasio porque quiere estar en forma y porque trabaja de lo que trabaja, pero que hay un momento en que si se quiere poner chungo tiene un brazo como tu cabeza. Que te creas que este señor luego se te pone delante y te puede agarrar la cabeza así y reventártela.

Creo que Mario Casas tiene esa cosa temible, entre comillas, de que tiene ese componente de hombre de acción. Luego, a ver, de Iñigo Astiberri creo que, en la película, el papel lo haría realmente Ibarra, que es el personaje en la primera que es amigo de Cosme. Ahí haría una especie de fusión de personajes. Aunque Iñigo Astiberri me gusta mucho y me hace dudar, pero no sé. Y Lucía tiene que ser un casting. No me puedo mojar en eso, porque Lucía, lo digo de mala confesión, pues se basa en mi señora, en el amor de mi vida. Y claro, aún no le veo cara. Yo haría un casting porque sí que me gustaría que fuera una chica con un físico especial y, fíjate, no se me ocurren muchos referentes para este papel ahora mismo. Españolas, por supuesto.

ZN: Sí, porque americanas sí que mencionas alguna en el libro.

DGG: Sí, yo creo que funciona mucho para hacerte la imagen mental, te haces tu propio casting, pero piensas eso y dices, «no, no me imagino a nadie, a ninguna actriz española», pero la encontraremos.

ZN: No son pocas las veces que dices aquello de “esta es otra historia y debe ser contada en otra ocasión”. Sin entrar en spoilers, la aparición de Sayón nos invita a que, por lo menos, Orígenes Secretos cuente con una tercera parte. ¿Cuánta vida le queda a esta franquicia o, si lo prefieres, cuánta vida te gustaría que le quedara? Porque, claro, son dos cosas distintas…

DGG: Totalmente, totalmente. Yo hago todo lo que puedo. Yo lucho todas las batallas. Yo muero en el campo de batalla. Porque, claro, podemos ir al campo de batalla a los dos metros de salir con veinte flechas en el culo. ¿Qué le vamos a hacer? (risas) Pero vamos, yo voy a pelearlo todo. Me gustaría mucho sinceramente que, como mínimo, fueran cinco libros. Eso es lo que me gustaría. Porque en mi cabeza, con eso, yo podría contar toda la historia que tengo que contar. En realidad son siete años y lo lógico sería que fueran siete libros. De hecho, fue lo que yo siempre pensé desde el principio. Siete libros como Harry Potter, como El Capitán Alatriste o como Los Reyes Malditos. Yo solo sigo la estela de las grandes sagas, pero soy muy consciente de que estamos en España y de que además… Me muevo siempre en tierra de nadie, tío. Es que es una cosa, Sergio… Mi reino no es de este mundo. Eso no me hace ni mejor ni peor. Pero es que estoy mal en todos lados. El otro día presenté… Te cuento para que te hagas una idea.

El otro día presenté esta novela en el Salón del Cómic. Claro que estás como una puta regadera. Fui la única persona de todo el listado de autores que presentó una novela en un Salón del Cómic. ¿Qué cojones? O sea, la gente va allí a que le hagan dibujos y tal. No quieren comprar libros en el Salón. El otro día estuve en Gigamesh firmando en Sant Jordi. Soy carne de Gigamesh y es donde yo me siento, en Barcelona, más a gusto. Pero veo los libros que hay puestos allí y todos son fantasía y ciencia ficción. Y luego está Orígenes Secretos. Orígenes Secretos no es ni fantasía ni es ciencia ficción. Obviamente, ¿dónde va a estar si no es en Gigamesh? Pues en ningún lado. Cualquiera que haya leído Orígenes Secretos entiende por qué tiene que estar ahí porque, todo eso, lo bordea. De hecho, cuántas veces habla el libro de Juego de Tronos, por ejemplo, pero no es lo que hay ahí.

Entonces, para Orígenes secretos, todo es muy difícil porque no tiene un sitio. ¿Qué hago? ¿Voy al festival de novela negra? Me miran raro. Es curioso porque es tan transversal… Es lo que tiene de malo la hibridación de géneros, que es súper divertido pero, a la vez, no perteneces a ningún sitio. En todos lados eres extranjero, estés donde estés, pero, ya te digo, para mí cinco estaría bien y mi editor sería muy feliz si lo hiciéramos en cuatro. Alexandre López Calvo, si me estás leyendo, ya sabes (risas). Soy consciente de que él está intentando convencerme para que sea en cuatro y no es imposible. Curro muy bien con él y, a lo mejor, encontramos una forma de hacerlo en cuatro. Pero a mí me gustaría que fuera así, en cinco. Ahí lo dejo.

ZN: Tanto Orígenes Secretos como Primera Aparición son cartas de amor a la capital de España. No solo ambientas los momentos más importantes de la trama en lugares como el Templo de Debob o en Cibeles, sino que conviertes a Madrid en un personaje más de la saga (con su cerebro, arterias, corazón y demás). ¿Te ves saliendo de tu espacio de confort, localizando futuras entregas en otras ciudades?

DGG: Eso es más complicado. Sí se me ocurren relatos como de aventuras. Vertice tuvo que tener alguna aventura en Barcelona, tuvo que tener alguna aventura en Valencia, seguro, pero, claro, no para el grueso. Spiderman es Nueva York, Superman es Metrópolis, Batman es Gotham… No sé, me da la sensación de que no podría irme, Vertice está muy ligado a Madrid. Mira que yo amo Barcelona. Me encanta y he vivido allí. De hecho, Orígenes Secretos, lo escribí en Barcelona.

ZN: Bonita simbiosis. Saliendo un poco de tu universo y volviendo al nuestro. Como amante de los superhéroes que eres, ¿Cuál crees que es su estado de salud actual?

DGG: Todo el mundo está deseando enterrar a los superhéroes. Me alucina que muchos sean supuestos influencers de este tema. Gente que, teóricamente, tendría que amarlos, pero que parece quieran acabar tanto con el universo Marvel como con el universo DC. Yo creo, sinceramente, que jamás van a desaparecer. Creo que están en un estado de salud muy bueno, en el sentido de que, fíjate, este año, ya veremos cómo de buenas o malas son las películas, pero, joder, yo tengo unas ganas de ver Los cuatro fantásticos, y Superman loquísimas. Claro que espero que, además, sean buenos, ¿vale? Y tengo mucha esperanza también en eso. Año tras año siguen estando en los primeros puestos de taquilla. Creo que habrá reconversiones. Veremos que la movida va a cambiar, pero como ha cambiado en los cómics. Si es que los lectores de cómics hemos vivido tantas crisis y tantas reconversiones y tantas, «venga, ahora de pronto empieza todo de nuevo». Tenemos ya el culo pelado, no nos asustamos de nada. Pero la gente del cine, yo creo que está empezando a entender los superhéroes. Está empezando a decir «un momento, o sea, que de pronto, después de cinco pelis ¿¿puedes volver a empezar?? ¿¿Que puedes hacer esto??».

Tienen que acostumbrarse. Hay que educar un poco al público, pero creo que el estado de salud es bueno. Yo creo que es un género que no va a desaparecer nunca, porque lo vivimos en los cómics. Es decir, en los cómics tú te pones a ver hablando siempre del noveno arte y estaban los cómics del oeste, luego la época de EC con el terror, luego los románticos, luego los de monstruos. Iba habiendo como distintas etapas. Llegó el universo Marvel y se acabaron las etapas, ya no había ciclos. El tío que hubiera intentado hacer un análisis de cómo funcionaban los tebeos en el año 59 o 60 ya no podía volver a hacerlo después del 61 porque se acabaron los ciclos. Es cierto que luego, por ejemplo, los 90 fueron más violentos, los 80 más adultos… pero siempre desde el pijama de colores. Y yo creo que eso puede hacerlo en cualquier industria cultural. En realidad es un vaticinio, ya veré si acierto o no, pero yo creo que será el año 2040 y tendremos peli de Spider-Man.

ZN: Ahora mismo estás centrado en la gira promocional de Primera Aparición pero ¿qué nos puedes contar de tus próximos proyectos?

DGG: Pues bueno, estoy muy pendiente de una locura que, tampoco quiero gafarlo, pero es cierto que existe y que no es ninguna broma: la película de Sargento Resines. El cómic es una chorrada como un piano, muy divertido, que os recomiendo porque de verdad os vais a echar unas risas, pero la película tiene, si se hiciera, va a tener bastante más enjundia. Yo digo que los referentes son Adaptation y Olvídate de mí, para que veáis las dos piezas que tengo en mi cabeza. No esperéis la chorrada por la chorrada. Eso es una, y luego yo sigo escribiendo muchos proyectos que, bueno, a ver si salen. Hay una cosa en esta industria que es como ir tirando botellas desde una isla desierta y a ver cuál llega. No sabes ni cuál va a llegar, ni si va a llegar. Así que sigo currando. Y si hay algún dibujante de cómics leyéndonos, que sepa que estoy huéfano de dibujante, así que me puede escribir y que me diga, «oye, mira, me molaría hacer algo contigo». Y yo encantado, porque ya sabes que yo, donde esté un buen tebeo, que se quite todo.

ZN: Pues nada, David, que te deseamos la mayor de las suertes y un placer haber podido charlar un ratito contigo.

DGG: El placer es mío, ya sabéis que cuando queráis ando por aquí cerca.