Meg Ryan vende su mansión de película en Montecito por 17,6 millones: una joya costera que rehúye del exceso y es pura sobriedad

Cuando se piensa en casas de famosos, se imagina un desfile de opulencia, mármoles brillantes y techos imposibles. Pero Meg Ryan ha decidido vender su residencia de Montecito con una declaración distinta: la belleza no está en la ostentación, sino en la coherencia estética. Esta propiedad, ubicada en una de las zonas más codiciadas de California y que ha sacado a la venta por 17,6 millones, no responde al cliché hollywoodiense. Lejos de excesos barrocos o decoraciones pretenciosas, su estilo es una oda a la luz natural, los materiales nobles y el diseño que respira, según Usa Magazine. Reforma integral Para Meg, menos es mejor, y su nueva afición parece ser reformar casas con un nivel que impresiona. Según ha publicado en redes, aseguró: “¡Qué proyecto tan divertido!”, dijo, cuando hacía nada que había comprado, reformado y vendido otra casa. En Decoesfera Explora la casa de Melody en Málaga: piscina, jardín y una cocina en verde menta que enamora Reformada con criterio y sin estridencias, el blanco predomina en interiores, potenciado por techos altos y ventanales amplios que conectan  con un jardín que parece sacado de un rodaje bucólico. Los suelos de madera, las chimeneas discretas y la selección de mobiliario evidencian una sensibilidad estética muy depurada. Todo está donde debe estar, sin sobras ni faltas. La casa no busca impresionar, sino habitarse. No grita lujo: susurra buen gusto. En esta casa (de la que Meg Ryan ha aumentado el precio en unos 10 millones de dólares desde que la compró en 2021 por la reforma y el incremento de metros) es fácil imaginar desayunos al sol, lecturas junto al ventanal o cenas íntimas frente a la chimenea. Una casa para estar, no solo para mostrar. Un jardín igual de sobrio El jardín sigue la misma línea de sobriedad consciente. Sin geometrías forzadas ni especies invasivas, ofrece sombra, textura y color sin competir con el entorno. La vegetación local domina, y cada rincón parece pensado para prolongar el interior hacia el paisaje costero. La ubicación, por supuesto, suma valor. Montecito es uno de los lugares más exclusivos —y discretos— del estado. Zona de residencia de otras celebridades como Oprah Winfrey, su ambiente combina privacidad, belleza natural y una arquitectura más contenida que la habitual exuberancia californiana. Más allá de las cifras de la operación —que superan los ocho millones de dólares— lo interesante está en el concepto. Esta casa no es solo un bien inmueble, sino una declaración estética que desafía la lógica del mercado de lujo. Ahora, la casa busca nuevo dueño. Y lo que vende no es solo terreno, metros o vistas. Lo que realmente ofrece es una forma de vivir más serena, elegante y pensada. Algo que, incluso en Montecito, resulta cada vez más excepcional y valioso. Foto | @megryan/Instagram En Decoesfera | Así es la casa de Arturo Valls en Madrid: una casa en colores neutros con una cocina XXL En Decoesfera | Así es la casa de Lola Índigo en Madrid: tonos intensos, materiales naturales y una distribución abierta - La noticia Meg Ryan vende su mansión de película en Montecito por 17,6 millones: una joya costera que rehúye del exceso y es pura sobriedad fue publicada originalmente en Decoesfera por Joana Costa .

Jun 6, 2025 - 05:50
 0
Meg Ryan vende su mansión de película en Montecito por 17,6 millones: una joya costera que rehúye del exceso y es pura sobriedad

Meg Ryan vende su mansión de película en Montecito por 17,6 millones: una joya costera que rehúye del exceso y es pura sobriedad

Cuando se piensa en casas de famosos, se imagina un desfile de opulencia, mármoles brillantes y techos imposibles. Pero Meg Ryan ha decidido vender su residencia de Montecito con una declaración distinta: la belleza no está en la ostentación, sino en la coherencia estética.

Esta propiedad, ubicada en una de las zonas más codiciadas de California y que ha sacado a la venta por 17,6 millones, no responde al cliché hollywoodiense. Lejos de excesos barrocos o decoraciones pretenciosas, su estilo es una oda a la luz natural, los materiales nobles y el diseño que respira, según Usa Magazine.

Reforma integral

Para Meg, menos es mejor, y su nueva afición parece ser reformar casas con un nivel que impresiona. Según ha publicado en redes, aseguró: “¡Qué proyecto tan divertido!”, dijo, cuando hacía nada que había comprado, reformado y vendido otra casa.

Reformada con criterio y sin estridencias, el blanco predomina en interiores, potenciado por techos altos y ventanales amplios que conectan  con un jardín que parece sacado de un rodaje bucólico.

Los suelos de madera, las chimeneas discretas y la selección de mobiliario evidencian una sensibilidad estética muy depurada. Todo está donde debe estar, sin sobras ni faltas. La casa no busca impresionar, sino habitarse. No grita lujo: susurra buen gusto.

En esta casa (de la que Meg Ryan ha aumentado el precio en unos 10 millones de dólares desde que la compró en 2021 por la reforma y el incremento de metros) es fácil imaginar desayunos al sol, lecturas junto al ventanal o cenas íntimas frente a la chimenea. Una casa para estar, no solo para mostrar.

Un jardín igual de sobrio

El jardín sigue la misma línea de sobriedad consciente. Sin geometrías forzadas ni especies invasivas, ofrece sombra, textura y color sin competir con el entorno. La vegetación local domina, y cada rincón parece pensado para prolongar el interior hacia el paisaje costero.

La ubicación, por supuesto, suma valor. Montecito es uno de los lugares más exclusivos —y discretos— del estado. Zona de residencia de otras celebridades como Oprah Winfrey, su ambiente combina privacidad, belleza natural y una arquitectura más contenida que la habitual exuberancia californiana.

Más allá de las cifras de la operación —que superan los ocho millones de dólares— lo interesante está en el concepto. Esta casa no es solo un bien inmueble, sino una declaración estética que desafía la lógica del mercado de lujo.

Ahora, la casa busca nuevo dueño. Y lo que vende no es solo terreno, metros o vistas. Lo que realmente ofrece es una forma de vivir más serena, elegante y pensada. Algo que, incluso en Montecito, resulta cada vez más excepcional y valioso.

Foto | @megryan/Instagram

En Decoesfera | Así es la casa de Arturo Valls en Madrid: una casa en colores neutros con una cocina XXL

En Decoesfera | Así es la casa de Lola Índigo en Madrid: tonos intensos, materiales naturales y una distribución abierta

-
La noticia Meg Ryan vende su mansión de película en Montecito por 17,6 millones: una joya costera que rehúye del exceso y es pura sobriedad fue publicada originalmente en Decoesfera por Joana Costa .