Este es el truco que aprendí de mi abuela para comprar espárragos blancos en conserva sin hebras en el supermercado

Dice el refrán, cuando hablamos de espárragos, que "los de abril, para mí; los de mayo, para el amo, y los de junio, para ninguno". El espárrago blanco, con una temporada excepcionalmente breve, es uno de los manjares más recurrentes de la cocina española y una auténtica bandera gastronómica en algunas regiones como Navarra, Aragón, La Rioja o, incluso, poniendo en el mapa a minúsculos pueblos castellanos como Tudela de Duero, un auténtico vergel en Valladolid de donde salen algunos de los mejores espárragos blancos de España. Sin embargo, nada hay más decepcionante, si hablamos de espárragos, que gastarse una pasta en espárragos blancos en conserva y que sean fibrosos y cargados de hebras. Una molestia que, a medida que gastamos más dinero, suele tener menos probabilidades de aparecer. No es cuestión de clasismo ni de entrar a jugar la baza del precio, pero habitualmente las cosas más caras también lo son porque el trabajo que hay detrás es más exigente y minucioso, no siendo todo una simple cuestión de marketing. Sin embargo, eso no quita que de vez en cuando nos llevemos sorpresas. Por eso, cuando voy a comprar espárragos blancos en conserva me fijo en dos cosas, haciendo gala de un par de trucos que me enseñó mi abuela cuando yo era pequeño y que son bastante evidentes para, en la medida de lo posible, que no topemos con espárragos fibrosos y cargados de hebras. Partiendo de la base de que no suelo racanear a la hora de comprar espárragos y que siempre me fijo en el origen del producto, donde –lo siento por esos países–, pero me niego a comprar espárragos blancos en conserva que sean de origen Perú o de origen China cuando tenga opciones –y bolsillo– para comprar espárragos españoles, hay un elemento que os servirá para evitar las hebras. De hecho, no me fijo necesariamente en el calibre como medida de calidad, pero hay una forma más práctica de fijarse en cómo va a ser un espárrago. Solo tenéis que coger el tarro, darle la vuelta y fijaros en la base de los espárragos. Cuando los puntos en la base están muy bien definidos es una señal de que el espárrago, generalmente, va a tener muchas hebras. Si veis muchos puntitos blanquecinos o amarillentos, bien marcados en la base, será síntoma de que el espárrago es fibroso y que tendrá muchas hebras; cuanto menos se noten esos puntos en el espárrago o ni se noten, mejor será en términos generales. El otro truco, si se puede llamar así, cuando compro espárragos y no quiero que me den gato liebre con el tamaño es fijarme primero en los tarros transparentes de una misma marca, ya que habitualmente vais a ver que hay opciones tanto en vidrio como en lata, y más de una vez te llevas una sorpresa cuando compruebas que el espárrago 'grueso' que habían anunciado no es tan grueso como creías. De todas formas, no es un capricho de las marcas, sino una categorización legal. Denominación calibre Diámetro en mm EXTRA GRUESO MÁS DE 19 MUY GRUESO DE 14 A 19 GRUESO DE 11 A 14 MEDIO DE 9 A 11 DELGADO MENOS DE 9 Por eso, vas a ver que a veces un grueso está más cerca de un medio que del muy grueso. Motivo por el que primero compruebo en tarro de vidrio el grosor de ese espárragos para esa marca cuando se anuncia en determinado calibre y, después, ya puedes comprar con más tranquilidad la lata opaca. Imágenes | Jaime de las Heras En DAP | Cómo cocer espárragos blancos en casa En DAP | Recetas con espárragos - La noticia Este es el truco que aprendí de mi abuela para comprar espárragos blancos en conserva sin hebras en el supermercado fue publicada originalmente en Directo al Paladar por Jaime de las Heras .

May 29, 2025 - 06:20

Dice el refrán, cuando hablamos de espárragos, que "los de abril, para mí; los de mayo, para el amo, y los de junio, para ninguno". El espárrago blanco, con una temporada excepcionalmente breve, es uno de los manjares más recurrentes de la cocina española y una auténtica bandera gastronómica en algunas regiones como Navarra, Aragón, La Rioja o, incluso, poniendo en el mapa a minúsculos pueblos castellanos como Tudela de Duero, un auténtico vergel en Valladolid de donde salen algunos de los mejores espárragos blancos de España.

Sin embargo, nada hay más decepcionante, si hablamos de espárragos, que gastarse una pasta en espárragos blancos en conserva y que sean fibrosos y cargados de hebras. Una molestia que, a medida que gastamos más dinero, suele tener menos probabilidades de aparecer.

No es cuestión de clasismo ni de entrar a jugar la baza del precio, pero habitualmente las cosas más caras también lo son porque el trabajo que hay detrás es más exigente y minucioso, no siendo todo una simple cuestión de marketing.

Sin embargo, eso no quita que de vez en cuando nos llevemos sorpresas. Por eso, cuando voy a comprar espárragos blancos en conserva me fijo en dos cosas, haciendo gala de un par de trucos que me enseñó mi abuela cuando yo era pequeño y que son bastante evidentes para, en la medida de lo posible, que no topemos con espárragos fibrosos y cargados de hebras.

Partiendo de la base de que no suelo racanear a la hora de comprar espárragos y que siempre me fijo en el origen del producto, donde –lo siento por esos países–, pero me niego a comprar espárragos blancos en conserva que sean de origen Perú o de origen China cuando tenga opciones –y bolsillo– para comprar espárragos españoles, hay un elemento que os servirá para evitar las hebras.

De hecho, no me fijo necesariamente en el calibre como medida de calidad, pero hay una forma más práctica de fijarse en cómo va a ser un espárrago. Solo tenéis que coger el tarro, darle la vuelta y fijaros en la base de los espárragos.

Cuando los puntos en la base están muy bien definidos es una señal de que el espárrago, generalmente, va a tener muchas hebras.

Si veis muchos puntitos blanquecinos o amarillentos, bien marcados en la base, será síntoma de que el espárrago es fibroso y que tendrá muchas hebras; cuanto menos se noten esos puntos en el espárrago o ni se noten, mejor será en términos generales.

El otro truco, si se puede llamar así, cuando compro espárragos y no quiero que me den gato liebre con el tamaño es fijarme primero en los tarros transparentes de una misma marca, ya que habitualmente vais a ver que hay opciones tanto en vidrio como en lata, y más de una vez te llevas una sorpresa cuando compruebas que el espárrago 'grueso' que habían anunciado no es tan grueso como creías. De todas formas, no es un capricho de las marcas, sino una categorización legal.

Denominación calibre	Diámetro en mm
EXTRA GRUESO	MÁS DE 19
MUY GRUESO	DE 14 A 19
GRUESO	DE 11 A 14
MEDIO	DE 9 A 11
DELGADO	MENOS DE 9

Por eso, vas a ver que a veces un grueso está más cerca de un medio que del muy grueso. Motivo por el que primero compruebo en tarro de vidrio el grosor de ese espárragos para esa marca cuando se anuncia en determinado calibre y, después, ya puedes comprar con más tranquilidad la lata opaca.

Imágenes | Jaime de las Heras

En DAP | Cómo cocer espárragos blancos en casa

En DAP | Recetas con espárragos

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La noticia Este es el truco que aprendí de mi abuela para comprar espárragos blancos en conserva sin hebras en el supermercado fue publicada originalmente en Directo al Paladar por Jaime de las Heras .