Cielo adentro, de Valeria Correa Fiz
*** Deseo en fuga Mi idea de ti es un cuerpo que las olas traen a la playa, el deseo, una y otra vez, recomenzando. No tiene fin, no acaba, no encuentra su límite. El grito de las aguas, el grito de las aves, el mucho viento, la roca mellada, algas muertas en la furia... Leer más La entrada Cielo adentro, de Valeria Correa Fiz aparece primero en Zenda.

Valeria Correa Fiz es una escritora argentina, residente en Madrid. Es autora de los libros de relatos La condición animal, seleccionado para el IV Premio Hispanoamericano de Cuento “Gabriel García Márquez”, y Hubo un jardín, ambos publicados por Páginas de Espuma. También de los poemarios El álbum oscuro, El invierno a deshoras, Museo de pérdidas, Así el deseo (plaquette) y Perder el sur. Su poesía ha sido distinguida con el I Premio Internacional de Poesía “Manuel del Cabral”, el XI Premio Internacional de Poesía “Claudio Rodríguez” y el III Premio de Poesía “Clara de Campoamor” y traducida al alemán y al inglés. Imparte talleres de escritura en Madrid y en el Instituto Cervantes de Milán. Presentamos una muestra de su último libro de poemas, Cielo adentro, publicado por el sello Isla Elefante en 2025, una obra que nos anima a tomar distancia y a capturar el instante y su luz en temas como el amor, la maternidad, el exilio o la fugacidad de la vida desde otra perspectiva.
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Deseo en fuga
Mi idea de ti
es un cuerpo que las olas
traen a la playa,
el deseo, una y otra vez,
recomenzando.
No tiene fin, no acaba, no
encuentra
su límite.
El grito de las aguas, el grito
de las aves,
el mucho viento,
la roca mellada,
algas muertas en la furia
de la sal.
Un dios burlón regula las mareas,
fiel a sus caprichos,
fiel a sus cóleras,
propone
una ola
que puede acariciar o derribarte.
***
Nocturnal
Para Almudena Ballester
Es la hora en que la luz vuelve a su madriguera.
Me voy despojando de las vocales
laringe arriba; por fin, escapo
al lenguaje.
Los árboles honestos
modulan la penumbra
de aquí para allá, voy
perdiendo memoria,
caras, luz, la forma de sus manos
amadas.
Las pupilas se despueblan,
la almohada traza su horizonte
blando.
Me gusta la noche.
En ella se cumple el destino
del hombre:
soñar la vida.
***
Ellos
Atrapados por la jarcia de la noche,
con las bocas descosidas por el hambre,
beben agua de lluvia al pie
de las usinas. Son el terror
desharrapado de los Centros
Comerciales, son sombras
dobles en la noche de los atrios de las Iglesias,
y del cajero automático de tu Banco,
Sociedad Limitada.
El ubicuo decorado urbano, son
girasoles para siempre engibados
en las bocas
de todos los metros, son
Señores de las Moscas por derecho mitológico.
Son Hermanos de la Basura y de los Restos
del payaso de Mc Donald’s.
No levantan la cerviz; tienen
los ojos por los suelos,
imantados por tu limosna que brilla
en su platito de cartón,
como vulgares estrellas, pobres piedras
que acabarán ellas también
por extinguirse. Nadie los mira.
Ellos no miran nada. El Ojo Tuerto
de Índices y Estadísticas
tampoco
los tiene en cuenta.
Ya han sido expulsados
de toda República
y de cualquier Reino, del portal
de tu Comunidad,
de ese Bar, de aquel Colegio,
hasta en el Infierno se olvidaron de ellos
y ya no esperan
ni siquiera un epitafio riguroso.
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Autora: Valeria Correa Fiz. Título: Cielo adentro. Editorial: Isla Elefante. Venta: Todos tus libros.
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