#ZN Libros – Clint Eastwood: vida y leyenda, por Patrick McGilligan

 

Edición España: Lumen – 2022
Autoría: Patrick McGilligan
Traducción: Eduardo García Murillo
Precio: 24,90 euros (libro en tapa blanda de 840 páginas)

 

¿Puede separarse al autor de su obra? ¿Puede el comportamiento personal ser determinante para la valoración de un trabajo? Estas preguntas resultan habituales y en estos tiempos donde existe cierta tendencia a promover cancelaciones es necesario recordar la necesaria separación entre uno y otra. Desde mi punto de vista, la obra no debe ser condenada al olvido ni utilizada como justificación, aunque no siempre sea tarea sencilla mantener la objetividad. En Clint Eastwood, el protagonista de este libro tenemos un ejemplo de ídem para tratar dicotomías de esta naturaleza.

Clint Eastwood ha desarrollado una exitosa carrera como cineasta, empezando como actor en películas de medio pelo y en una televisión que aún se veía como la hermana pequeña del cine. Su trayectoria, rematada con el reconocimiento de público, crítica (no toda) y premios de toda índole ha sido glosada en términos mayormente positivos, pródigos en elogios. Eastwood se ha presentado como un hombre de familia humilde que ha construido su carrera actuando de forma independiente, fundando su propia productora y sin estar bajo el control de las grandes compañías cinematográficas. Patrick McGiligan parte de esta versión oficial plasmada en una biografía autorizada para ponerla a prueba.

El biógrafo comienza presentando el árbol genealógico de Clint Eastwood, así como la vida y milagros de algunos integrantes destacados de sus pobladas ramas. Este ejercicio que el autor reconoce como habitual en sus trabajos de esta naturaleza, sirve para desmentir la condición del cineasta como miembro de una familia de clase obrera obligada a moverse constantemente por el oeste de unos Estados Unidos que padecían las consecuencias del desplome bursátil de 1929. La versión sostenida por McGilligan se mantiene al contar la niñez y adolescencia de Eastwood, así como su servicio militar y presenta a alguien perteneciente a un hogar que no era millonario, pero tampoco pasaba carestía.

El libro continúa narrando las circunstancias del desembarco de don Clint en el mundillo de la actuación, aprovechando la ocasión para matizar, corregir o refutar ciertos pasajes de esos inicios. Eastwood adquiere popularidad en una serie de televisión llamada Rawhide -Látigo o Cuero crudo en el ámbito hispano- y será lanzado al estrellato por Sergio Leone gracias a su célebre trilogía del dólar, donde interpreta al pistolero sin nombre de mirada ceñuda y poncho polvoriento. El ascenso a la gloria es narrado con todo detalle, sirviendo además para conocer las interioridades de la producción cinematográfica estadounidense y los diversos ardides empleados con objetivos no siempre loables. El acceso de Eastwood a labores creativas como la dirección o la producción permite conocer ciertos aspectos de su personalidad que contrastan con la imagen pública que ha presentado a lo largo de las décadas. El escritor presenta a un individuo que trabaja rápido y se mantiene dentro de calendarios y presupuestos, lo cual resulta del gusto de las productoras con la que coopera, pero también expone ciertas miserias en las que maese Clint se presenta como alguien colérico, cicatero, rencoroso e ingrato con quienes han trabajado con él y han contribuido a cimentar las bases de su éxito.

Uno de los hilos argumentales que viene a poner en tela de juicio la imagen pública transmitida desde el entorno del cineasta es el de su vida privada. Eastwood es presentado como un mujeriego impenitente y totalmente infiel, siendo la biografía una crónica de sus principales relaciones sentimentales, en las que el protagonista tampoco sale bien parado. La imagen de hombre familiar que transmite en su primer matrimonio es echada abajo con el relato de sus múltiples infidelidades, pero es el capítulo de su larga relación con Sondra Locke el que presenta la grieta más larga y profunda en la cara pública del sanfranciscano. La historia de parejas posteriores como Frances Fisher remarca las miserias privadas del cineasta, que discurren paralelas a su camino hacia el triunfo y a su reconocimiento como referente cultural en todo el mundo.

El libro, salido en 2010 y con una actualización reflejada en una edición fechada en 2022, ha tenido también su escarceo judicial, con amenaza de pleito por parte del protagonista a su pesar. La controversia se saldó con un acuerdo extrajudicial del que no se puede hablar y sobre el que el autor manifiesta que todo lo que está vertido ha sido contrastado, limitándose la aplicación del pacto a la corrección de algunos detalles menores. No pudiendo valorar aquello que no es posible conocer, hay que decir que resulta revelador que el aludido no haya podido tumbar una publicación que, sin desmerecer sus éxitos artísticos, le deja un poco bastante como chupa de dómine.

En todo caso, la obra resulta de interés para toda persona que quiera saber más sobre un señor que parece dirigirse con paso firme hacia la centena de años, sin dejar por ello de hacer películas. Además, hay que repetirlo, tiene el incentivo de que permite conocer ciertas interioridades del negocio fílmico, con especial atención al asunto de los derechos de propiedad intelectual, que es una temática sobre la que quien estas líneas escribe tiene cierta debilidad.