Un camarero se corona con su contundente respuesta a la oferta laboral de un hostelero: «Lo siento pero…»
El lado menos visible del trabajo en hostelería Desempeñarse en el ámbito de la hostelería no es tarea sencilla. La situación se complica aún más en destinos turísticos donde, durante la temporada alta, la afluencia masiva de visitantes satura la capacidad de bares y restaurantes. En estos lugares, las ofertas de empleo abundan, pero muchas ... Leer más

El lado menos visible del trabajo en hostelería
Desempeñarse en el ámbito de la hostelería no es tarea sencilla. La situación se complica aún más en destinos turísticos donde, durante la temporada alta, la afluencia masiva de visitantes satura la capacidad de bares y restaurantes. En estos lugares, las ofertas de empleo abundan, pero muchas de ellas no logran cubrirse.
Uno de los principales motivos es que las condiciones laborales ofrecidas no siempre resultan atractivas. Más allá del salario, los horarios suelen ser inciertos: los turnos empiezan a una hora concreta, pero el final de la jornada depende del flujo de clientes. Algunos días, los locales pueden cerrar temprano; en otros, la actividad se extiende hasta altas horas de la madrugada.
Horarios extensos y falta de descanso
Además, trabajar fines de semana y festivos es casi una norma, lo que desincentiva a quienes valoran su tiempo libre. Justamente estas circunstancias —la extensión de las jornadas y la escasez de días de descanso— han llevado a un candidato a rechazar una oferta laboral en el sector.
El caso ha sido compartido por la cuenta de X @soycamarero, que publicó una captura de la conversación entre el aspirante y el empleador. En ella, se especifica que el horario del puesto es desde las 5 de la tarde hasta el cierre. El problema radica en la hora de cierre: a las 2:30 de la madrugada los viernes, sábados y festivos, y a las 2:00 los días restantes.
“No me interesa que me exploten”
Esto implica jornadas cercanas a las nueve horas diarias. El aspirante hizo sus cálculos y respondió con claridad: “Haciendo cálculo he visto que trabajaría 49 horas semanales. Y lo siento pero no me interesa que me exploten”.
Pero esa no fue la única razón para declinar la oferta. Cuando preguntó por los días de descanso, el encargado le informó que únicamente tendría uno por semana. “Al día siguiente entras por la tarde en el mismo horario”, añadió, dejando ver que la rotación o compensación de descansos brillaba por su ausencia.
Así deberíamos responder todos ante estas “ofertas” pic.twitter.com/xawW5ExQXe
— Soy Camarero (@soycamarero) June 22, 2025
Condiciones cuestionables y sueldo bajo
A todo esto, se suma un salario de 1.200 euros mensuales, una cifra que no parece justificar las condiciones ofrecidas. “Así deberíamos responder todos ante estas ‘ofertas’”, concluyó el administrador de la cuenta @soycamarero, denunciando públicamente esta situación que, por desgracia, no es un caso aislado en el sector.