Las plantas que ayudan a mantener escorpiones y alacranes fuera del jardín y del hogar
Conviven con nosotros, aunque no se dejen ver fácilmente. Los escorpiones y alacranes son visitantes discretos, nocturnos, y a menudo subestimados hasta que aparecen donde menos se les espera: en un zapato, bajo una piedra o en la rendija del baño. Pero más allá de la limpieza o las trampas químicas, la naturaleza también ofrece sus propias defensas. Algunas especies vegetales desprenden olores, aceites esenciales o compuestos que resultan repelentes para estos arácnidos. Se trata de plantas fáciles de cultivar, muchas de ellas ornamentales o incluso útiles en la cocina, que aportan color y funcionalidad sin necesidad de recurrir a soluciones agresivas. En Directo al Paladar La planta que perfuma la casa y mantiene alejados a los mosquitos: por qué todo el mundo la pide en primavera Una de las más eficaces es la lavanda. Su aroma, tan agradable para los humanos, actúa como repelente natural para numerosos insectos y arácnidos, incluidos los escorpiones. Plantarla cerca de accesos, muros o zonas de paso puede crear una barrera invisible pero efectiva. Además, su resistencia al sol y bajo mantenimiento la hacen ideal para exteriores. Otra aliada insospechada es la menta, especialmente en su versión poleo o menta fuerte. Su olor penetrante altera el comportamiento de muchos pequeños depredadores, que evitan las áreas donde esta planta se encuentra. Conviene, eso sí, controlarla: tiende a expandirse con rapidez y puede invadir espacios si no se delimita bien. Más exótica, pero igualmente útil, es la ruda. Esta planta ha sido tradicionalmente usada como amuleto contra plagas, y su eficacia no es del todo mito. Su olor fuerte y resinoso tiene propiedades insecticidas naturales, y se ha observado que en jardines donde abunda, la presencia de escorpiones disminuye. Es, sin embargo, una planta delicada de manejar: puede causar irritaciones en pieles sensibles. En Directo al Paladar Las mejores plantas para el dormitorio que además de decorar limpian el aire mientras duermes La clave no está solo en plantar, sino en ubicar correctamente estas especies. Cerca de puertas, ventanas, rendijas o rincones húmedos —los lugares preferidos de los escorpiones para refugiarse— es donde tendrán mayor impacto. También pueden colocarse en macetas móviles, ideales para ajustar la protección según la estación. Defensa natural Estas estrategias vegetales no eliminan el riesgo al 100 %, pero sí lo reducen de forma significativa. Combinadas con una buena limpieza del entorno, retirada de escombros y control de insectos como grillos o cucarachas —que sirven de alimento a los escorpiones—, se consigue una defensa pasiva pero continua. Lo interesante es que estas plantas no solo protegen, también decoran. Introducen verde, aroma y textura al jardín o al interior del hogar, mientras actúan como guardianas naturales. En tiempos donde se valoran las soluciones no tóxicas, sumar esta barrera botánica tiene más sentido que nunca. La próxima vez que veas una lavanda florecer o una mata de menta agitarse con el viento, no pienses solo en su belleza o en sus usos culinarios. Piensa también en su papel silencioso, pero eficaz, como centinela verde frente a un enemigo que se esconde bajo las piedras. Foto | Henrik Le-Botos En DAP | Los árboles perfectos para el jardín de casa: no agrietan el suelo, dan sombra y hasta producen fruta En DAP | Cómo prevenir y eliminar las malas hierbas sin dañar tu jardín - La noticia Las plantas que ayudan a mantener escorpiones y alacranes fuera del jardín y del hogar fue publicada originalmente en Directo al Paladar por Joana Costa .

Conviven con nosotros, aunque no se dejen ver fácilmente. Los escorpiones y alacranes son visitantes discretos, nocturnos, y a menudo subestimados hasta que aparecen donde menos se les espera: en un zapato, bajo una piedra o en la rendija del baño.
Pero más allá de la limpieza o las trampas químicas, la naturaleza también ofrece sus propias defensas. Algunas especies vegetales desprenden olores, aceites esenciales o compuestos que resultan repelentes para estos arácnidos.
Se trata de plantas fáciles de cultivar, muchas de ellas ornamentales o incluso útiles en la cocina, que aportan color y funcionalidad sin necesidad de recurrir a soluciones agresivas.
Una de las más eficaces es la lavanda. Su aroma, tan agradable para los humanos, actúa como repelente natural para numerosos insectos y arácnidos, incluidos los escorpiones. Plantarla cerca de accesos, muros o zonas de paso puede crear una barrera invisible pero efectiva. Además, su resistencia al sol y bajo mantenimiento la hacen ideal para exteriores.
Otra aliada insospechada es la menta, especialmente en su versión poleo o menta fuerte. Su olor penetrante altera el comportamiento de muchos pequeños depredadores, que evitan las áreas donde esta planta se encuentra. Conviene, eso sí, controlarla: tiende a expandirse con rapidez y puede invadir espacios si no se delimita bien.
Más exótica, pero igualmente útil, es la ruda. Esta planta ha sido tradicionalmente usada como amuleto contra plagas, y su eficacia no es del todo mito. Su olor fuerte y resinoso tiene propiedades insecticidas naturales, y se ha observado que en jardines donde abunda, la presencia de escorpiones disminuye. Es, sin embargo, una planta delicada de manejar: puede causar irritaciones en pieles sensibles.
La clave no está solo en plantar, sino en ubicar correctamente estas especies. Cerca de puertas, ventanas, rendijas o rincones húmedos —los lugares preferidos de los escorpiones para refugiarse— es donde tendrán mayor impacto. También pueden colocarse en macetas móviles, ideales para ajustar la protección según la estación.
Defensa natural
Estas estrategias vegetales no eliminan el riesgo al 100 %, pero sí lo reducen de forma significativa. Combinadas con una buena limpieza del entorno, retirada de escombros y control de insectos como grillos o cucarachas —que sirven de alimento a los escorpiones—, se consigue una defensa pasiva pero continua.
Lo interesante es que estas plantas no solo protegen, también decoran. Introducen verde, aroma y textura al jardín o al interior del hogar, mientras actúan como guardianas naturales. En tiempos donde se valoran las soluciones no tóxicas, sumar esta barrera botánica tiene más sentido que nunca.
La próxima vez que veas una lavanda florecer o una mata de menta agitarse con el viento, no pienses solo en su belleza o en sus usos culinarios. Piensa también en su papel silencioso, pero eficaz, como centinela verde frente a un enemigo que se esconde bajo las piedras.
Foto | Henrik Le-Botos
En DAP | Cómo prevenir y eliminar las malas hierbas sin dañar tu jardín
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Las plantas que ayudan a mantener escorpiones y alacranes fuera del jardín y del hogar
fue publicada originalmente en
Directo al Paladar
por
Joana Costa
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